Primeros pasos de «Cor de Suro»

El pasado 30 de marzo, la presidenta de la Asociación para la Promoción de la Artesanía en la Sierra de Espadán “Cor de Suro”, Stephani T. Teichelmann, estampó su firma en el convenio con el Ayuntamiento de Eslida para la cesión de un espacio de trabajo por un periodo renovable de 4 años.

Este aula-taller, emplazado en la última planta del antiguo edificio de la Caja Rural, sito en la calle Germà Mari Esteller nº4 del citado municipio, ha recibido también una dotación generosa de mobiliario, demostrando así el interés del consistorio por seguir apostando por el desarrollo local y sostenible (no en vano esta localidad es famosa por sus “aguas, corcho y miel”).

Allí es donde lxs miembrxs de “Cor de Suro” han trasladado los equipos y herramientas adquiridos en el transcurso del Laboratorio de Corcho “SuberLab”, con la intención de empezar a manufactura artesanías y objetos de corcho natural, así como impartir formaciones en torno al origen, uso, aprovechamiento e importancia de este recurso natural. 

Con este propósito sus componentes se reúnen, de momento, una vez a la semana, aunque si hay algún evento cercano suelen aumentar la frecuencia e intensidad del trabajo, como ha sido el caso de la Feria de los Oficios celebrada el pasado 23 y 24 de abril en Almedíjar, donde además de exponer nuevos diseños, también recibieron encargos de objetos a medida e impartieron un taller para la confección de macetas de bornizo.

El puesto de “Cor de Suro” tuvo una gran acogida entre vecinos, vecinas y visitantes, quienes destacaron la originalidad y belleza de sus creaciones. 

Tras constatar en primera persona la ausencia de artesanxs que continúen trabajando de forma profesional o amateur con este material, podemos decir que “Cor de Suro” llega, entre otros, para ocupar este espacio, planteando nuevas alternativas y aumentando el abanico de posibilidades del corcho natural, más allá del clásico tapón.

Más información en: @cordesuro

Nace «Cor de Suro»

El pasado 15 de febrero se constituyó oficialmente la asociación “Cor de Suro”, formada por las/los promotoras/es del corcho que se capacitaron y motivaron en el transcurso del Laboratorio de Corcho “SuberLab”. 

Entre noviembre de 2021 y febrero de este año, el grupo de promotoras/es del corcho se reunió semanalmente para soñar y planificar esta nueva etapa. Fruto de este proceso, ha nacido una nueva entidad que tiene como propósito promover el corcho natural y la artesanía desde la Sierra de Espadán. 

El grupo motor de esta iniciativa está compuesto por cinco personas que a continuación os presentamos: 


Víctor Bayona Viana (alias “el noi del suro”), enamorado de la Sierra de Espadán, donde crecen y se hunden sus raíces, amante del bosque de alcornoques y apasionado de la artesanía de corcho natural. Está convencido de que una nueva cultura en el uso y aprovechamiento de los recursos naturales puede contribuir a preservar los ecosistemas y revitalizar la vida en los pueblos del interior, dotándolos de mayor autonomía de cara a un futuro a todas luces incierto. En la actualidad trabaja como técnico en la Societat d’Amics de la Serra Espadà, entidad sin ánimo de lucro promotora, entre otras iniciativas, del Laboratorio Subersivo.


Steffi Teichelmann es chilena, amante de la montaña y del deporte en la naturaleza. Formada en Diseño de Moda, Steffi tiene una larga trayectoria de diseño y confección de vestuario para teatro y danza, tuvo su propia tienda de diseño, arte y artesanía chilena en la ciudad de Valparaíso y  fundó su propia marca de accesorios para ciclistas urbanos “Kiklos”. Se vino a España para cursar el Máster de Co-diseño de Moda y Sostenibilidad en la EASD de Valencia y se enamoró de la ciudad y del territorio rural a su alrededor. Para Steffi el trabajo con corcho es una manera de unir su pasión por el diseño y el trabajo manual con su amor por la naturaleza y su vocación para protegerla. 


Saül Vanaclocha nació en Valencia pero es un ciudadano del mundo . Licenciado en Bellas Artes. Cantante, músico y compositor. Profesor de canto y guitarra. Instructor de Qigong. Artesano y enamorado del corcho natural. Creador del proyecto ‘Generando Armonía’ que combina arte y salud. Le apasiona la naturaleza y se sumerge en ella para comprender la esencia de lo que significa ser humano. Dice que no le es posible amoldarse a los caminos establecidos y por ello prefiere arriesgar y caminar con creatividad desde su ser auténtico.

Ana Fialho es de Alentejo, la región portuguesa más rica en alcornoques. Así cómo Steffi, Ana se vino a España a hacer el Máster de Co-diseño de Moda y Sostenibilidad en Valencia y se encantó por la ciudad y su entorno. A pesar de venir de un territorio con mucha tradición corchera, su amor por el corcho, y por el árbol que lo produce, no floreció hasta que empezó a trabajar el material con sus propias manos. Después de algunas experiencias diseñando complementos de corcho como freelancer, empezó a jugar con las muestras de tejido de corcho que le enviaban las marcas y la inquietud creativa le llevó a crear productos innovadores con diseño minimalista, funcional y “zero waste”. Fundó su propia marca de complementos veganos hechos con tejido de corcho “Pell d’Arbre” la cual acabó poniendo a “SuberLab” en su camino.

Pilar Vila Senent nació en Valencia y, cuando era adolescente, en una excursión a la Sierra de Espadán, conoció el bosque de alcornoques. Más tarde aprendió cómo de ese árbol se sacaba el corcho. Esas memorias la acompañaron y se transformaron en el deseo de trabajar manualmente este material. “SuberLab” se convirtió en ese espacio donde poder crear en colectivo algo nuevo poniendo en valor la artesanía, el diseño, el arte y el alcornocal. Se licenció en Bellas Artes y estuvo viajando entre la península y las islas hasta decidir establecerse en el medio rural.  Las artes manuales se mantuvieron en su vida mientras profesionalmente trabaja como vigilante forestal. El activismo también está muy presente no solo con este nuevo proyecto como también a través de su participación en el Colectivo feminista Alto Palancia. 

Una de los primeras acciones de la asociación “Cor de Suro” ya en marcha, y sobre la cual os contaremos más en un próximo post, es la apertura de un espacio de trabajo y encuentro localizado en la Sierra de Espadán, que servirá no solo para la creación colaborativa de objetos artísticos y de artesanía en corcho natural, sino también para desarrollar acciones formativas y educativas, exposiciones y otras actividades al servicio de las personas y del territorio.

Así mismo, con la intención de poner en valor los bosques de alcornoques de la Sierra de Espadán, se diseñarán diversas actividades experienciales de toma de contacto con la naturaleza y educación ambiental con especial énfasis en el uso y aprovechamiento del corcho como recurso natural y local.

Se trabajará también para fortalecer el tejido cultural, recuperar y promover los saberes tradicionales y articular el territorio, estableciendo alianzas y generando sinergias con otras entidades, colectivos y personas con las que comparta intereses, valores u objetivos. 

En breve os contaremos más sobre “Cor de Suro”, pero mientras llega ese momento os animamos a que sigáis el proyecto en Instagram (@cordesuro).

Al servicio del corcho

El pasado 30 de octubre dimos por finalizadas las actividades del laboratorio de corcho “SuberLab”, en concreto aquellas financiadas a través de la subvención de la Diputación de Castellón, gracias a la cual ha sido posible consolidar un grupo de promotores y promotoras del corcho, formado por varios de los participantes en los talleres prácticos y en la residencia creativa.

Se trata de cinco personas que provienen del ámbito del diseño, la arquitectura y las bellas artes, que gracias a «SuberLab» han descubierto las características y cualidades del corcho natural, y que se han mostrado en todo momento interesadas en seguir trabajando de manera conjunta, lo que les ha llevado ha participar en una serie de sesiones dinamizadas por Johana Ciro Calderón, experta en innovación y emprendimiento, con el propósito de mejorar la cohesión del grupo y reflexionar sobre las diferentes posibilidades que se presentan a partir de ahora, considerando tanto sus intereses y capacidades, como las cualidades y potencial de este recurso local, natural y renovable.

También pudieron disfrutar de una formación y de una asesoría para la puesta en marcha de un emprendimiento en el marco de la economía social, de la mano de Sergio Ruiz, Miguel Ángel Honrubia, Julia Barranco y Lidia Vidal, todos ellos técnicos y técnicas de “La Niuada”, centro de emprendimiento social con sede en Benlloch (Castellón), que en esta ocasión se trasladó hasta tierras del Alto Palancia para compartir con nosotros sus conocimientos y experiencia.

Por último, pudimos contar con la presencia de Elena Medina, la artesana de Ronda (Málaga) que está detrás de la marca “Sonrisas de Corcho”, y que de nuevo se desplazó hasta la Sierra de Espadán para conocer de primera mano el trabajo de sus artesanos y artesanas, explorando las diferentes posibilidades que existen de combinar el corcho con otros materiales, transfiriendo todo el aprendizaje adquirido durante su estancia a los promotores y promotoras de corcho, y facilitando el encuentro e intercambio de conocimientos entre éstos/as y los artesanos y artesanas locales.

Fruto de todo lo anterior, el grupo de promotores y promotoras tiene previsto constituir en el futuro una asociación para la promoción de corcho, que les permita seguir avanzando en el dominio y en la difusión de este material, así como profundizar en su vínculo con el territorio.

Mientras llega ese momento, gracias a los equipos y herramientas puestos a disposición por el proyecto “SuberLab” y al espacio de trabajo con el que cuentan en el albergue “La Surera” de Almedíjar, el grupo ya ha empezado a aceptar encargos para el diseño y manufactura de pequeñas artesanías para obsequiar estas navidades.

Mucho corcho, pocos alcornoques

Durante nuestra ruta de la pasada primavera por los territorios corcheros de la Península, dejamos intencionadamente un lugar por recorrer: la ciudad de Oporto y sus alrededores, conocida como la capital mundial de la industria corchera y sede de la multinacional Amorim.

Iniciamos nuestra búsqueda de artesanos/as de corcho callejeando por la decadente y a la vez fascinante Oporto, plagada en su zona centro por tiendas de souvenirs y locales de hostelería. Y entre los múltiples recuerdos para turistas, el corcho siempre presente… aunque en forma de aglomerado.

Entre los lugares más interesantes que visitamos, mencionar por un lado la “Casa das Rolhas”, un pequeño establecimiento enclavado en una de las calles más turísticas de Oporto, donde su vetusto propietario sigue vendiendo tapones y productos de otra época; y por otro “Cork Solutions”, una tienda donde se comercializan objetos de aglomerado con al menos un diseño y una estética bien cuidada.

La cosa a lo largo de la ribera del Duero no cambia mucho: los souvenirs fabricados con corcho triturado reinan en los múltiples mercadillos al aire libre que salpican las orillas del río aquí y allá. Con la excepción de José Ferreira, un agradable artesano que trabaja con tapones de corcho reciclados y tiene un puesto en el mercadillo artesanal de los Jardines del Paseo Alegre. El nombre de su proyecto es “Montados de Sobras” y podéis conocer más sobre sus creaciones a través de su Facebook.

https://es-la.facebook.com/montadosdesobras/

Una vez todo el pescado estuvo vendido en la capital de la Región Norte de Portugal, pusimos rumbo a Santa María de Feira, en el área metropolitana de Oporto, donde tiene su sede el conglomerado de empresas portuguesas que transforman el corcho en tapones y triturado, entre ellas la poderosa Amorim.

Allí pudimos visitar el Museo de Santa María de Lamas, de la mano de su directora Susana Ferreira. También tuvimos la oportunidad de conocer las obras de su artista residente, Manuel Augusto Ferreira Fontes, que pinta retratos, talla esculturas y confecciona maquetas de corcho, en la mayoría de casos aglomerado.

En Santa Maria de Lamas también se encuentras la sede de Cincork, único Centro de Formación Profesional de Portugal especializado en la industria de corcho. Cincork es un centro público concertado cuyo propósito original era la cualificación de los trabajadores/as de la industria corchera implantada en la zona. Su director, Délio Carquejo, muy amablemente nos hizo un recorrido completo por las instalaciones y nos mostró toda la maquinaria y los equipos de los que disponen.

https://www.cincork.com/

Quedamos muy impresionados con la visita, ya que dentro del mismo centro cuentan con una una pequeña industria corcho-taponera y una trituradora, donde los alumnos/as pueden conocer los secretos de la profesión antes de acceder a su primer empleo. También cuentan con un FabLab equipado con la última tecnología donde alumnos/as y empresas de la zona pueden desarrollar sus proyectos más innovadores.

Durante la visita al centro también tuvimos la oportunidad de conocer el trabajo de Rui Rodrigues, uno de los docentes de Cincork, responsable de todos los módulos que tienen que ver con el corcho. Rui es además un experimentado artesano, al que le encanta compartir conocimientos y habilidades con las personas que quieren introducirse o profundizar en el manejo de este material en sus diferentes formatos. Este año precisamente ha sido el primero en impartir una Formación Modular Certificada bajo el título Técnicas en la Artesanía de Corcho.

Finalmente, gracias a la intermediación del director del centro, pudimos conocer un proyecto empresarial justo en la línea de lo que andábamos buscando al iniciar nuestro viaje, al menos conceptualmente hablando. Este emprendimiento, que lleva solo 3 años en marcha, responde al nombre de «The Cork Magicians Company» y está liderado por Américo Magalhaes e Isabel Silva, con la inestimable ayuda del diseñador residente Paulo Oliveira.

Juntos han promovido la marca «Magna Natura», dedicada al diseño y fabricación artesanal de mobiliario, revestimientos de pared y elementos decorativos, todos ellos confeccionados mayoritariamente con los descartes de corcho natural que la industria taponera de la zona deshecha y destina a la trituradora, o al menos hasta que aparecieron estos dos auténticos outsiders en escena.

https://es.magnanatura.com

Podríamos decir que es precisamente ésta la única iniciativa basada en el empleo de corcho natural que fuimos capaces de identificar durante nuestro viaje por una maravillosa tierra con mucho corcho, pero pocos alcornoques.

Buenas noticias

En el laboratorio de corcho SuberLab estamos de enhorabuena, ya que la Diputación Provincial de Castellón nos ha comunicado que apoyará nuestro proyecto a través de la convocatoria de ayudas económicas para acciones innovadoras de fomento de empleo, emprendimiento y promoción económica, gracias a lo cual prolongaremos el periodo de ejecución del proyecto hasta octubre de 2021.

Las actividades a implementar con esta subvención consistirán en un taller práctico en torno al corcho, una residencia creativa y dos consultorías en materia de comercialización de artesanías y ecodiseño.

Agradecemos sinceramente el apoyo de esta entidad pública y desde hoy mismo la incluimos dentro del grupo de promotores del proyecto.

Hombres (y mujeres) del corcho

Y como colofón de nuestra ruta por los territorios corcheros de la Península, pusimos rumbo hacia las provincias andaluzas corcheras por excelencia: Cádiz y Málaga.

Justo en la frontera entre estas dos provincias, en uno de los principales accesos al Parque Natural de Los Alcornocales, se ubica uno de los centros de referencia para el sector corchero andaluz: la Suberoteca de Andalucía, en el término municipal de Alcalá de los Gazules.

En este espacio dependiente de la Junta de Andalucía, se lleva un control exhaustivo de la calidad del corcho que se saca cada campaña. Un servicio de especial relevancia para un territorio donde la saca sigue teniendo un fuerte impacto sobre la economía local, especialmente de la mano de los jornales que perciben sacadores de corcho (corcheros) y arrieros.

En la Suberoteca tuvimos la oportunidad de conocer a Juan León “Moreno”, que trabaja para la Junta de Andalucía y que durante sus ratos libres convierte el corcho en verdaderas obras de arte de estilo rústico. Juan, que también es corchero, se abastece principalmente de las panas de corcho crudo que selecciona en cada campaña y que el mismo hierve y prensa. Como suele ocurrir, las herramientas empleadas para labrar el corcho son de lo más sencillas, y en su caso destaca una colección de cuchillos fabricados en Portugal que maneja con increíble precisión. Sus creaciones no se venden en ninguna feria y tampoco acepta encargos. Tan solo los visitantes de la Suberoteca tienen el privilegio de poder disfrutar de la pequeña exposición donde se muestran.

De Alcalá de los Gazules nos trasladamos hasta Jimena de la Frontera, otro municipio gaditano de gran tradición corchera, donde los sacadores de corcho y arrieros llevan tiempo organizándose con el objetivo de mejorar sus condiciones laborales.

Y es en esta localidad donde vive Javier, hijo y nieto de corcheros, cuya destreza y creatividad con el corcho nos sorprendió gratamente. Javier elabora en sus ratos libres estas maravillas, que solo comparte con familiares y amigos.

Todavía en la provincia de Cádiz, no podíamos dejar de visitar en Tarifa a Manuel Medina, al que conocimos a través de un programa de televisión de Canal Sur. Manuel, que de joven trabajó como arriero, es un autodidacta que ha desarrollado una técnica y un estilo muy particular en la confección de objetos y utensilios de corcho. En el pasado era habitual encontrarlo vendiendo sus artesanías por los mercados locales, pero el escaso reconocimiento al valor de su trabajo hizo que desistiera hace solo unos años. Aunque su actual ocupación ya no le deja mucho tiempo para dedicarle al corcho, todavía conserva la pasión por este material, así como una buena muestra de sus creaciones.

Y como última parada dentro de nuestra gira por tierras andaluzas, viajamos hasta la histórica localidad de Ronda, en los alrededores de la cual pudimos visitar el taller de Elena y José, o lo que es lo mismo: Sonrisas de Corcho.

Estos dos enamorados del alcornoque y de su piel, elaboran bisutería de muy alta calidad y belleza, además de otros objetos como cajas nido, lámparas, colgantes, etc. destacando su trabajo por la originalidad tanto de los diseños, como de los procedimientos aplicados. Iniciaron su actividad cuando todavía vivían en el cercano Valle del Genal, un paraíso para los amantes de las quercíneas y de la cultura morisca. Hasta la irrupción de la pandemia, vendían sus artesanías entre diferentes ferias anuales en las que participaban y un puesto permanente en una de las calles más turísticas de Ronda. Las herramientas que emplean son bastantes sencillas, abasteciéndose con pequeñas cantidades de corcho que consiguen a través de sus contactos en la zona.

No queremos finalizar esta crónica sin agradecer la amabilidad y generosidad de personas como Manuel Díaz, de la Suberoteca de Andalucía; Juan Manuel Gutiérrez, presidente de la Asociación de Corcheros y Arrieros de Andalucía (ACOAN); y especialmente dos “friquis” del corcho como yo: Ignacio García, Director Ejecutivo de Euronatura, y Agustín Coca, antropólogo de la Universidad Pablo de Olavide.

O país da cortiça

Tras nuestra aventura por tierras extremeñas, y aprovechando la cercanía de la frontera hispano-lusa, decidimos adentrarnos en el sur de Portugal, concretamente en la región de Alentejo, con el propósito de conocer de primera mano el trabajo de los artesanos de corcho en el principal país productor y transformador de este recurso a nivel mundial.

La tarea no fue fácil, ya que en las fechas en las que viajamos todo el país se encontraba en alerta sanitaria, con un grado restricción mucho más elevado que en el estado español. Así pues, tras cruzar la frontera por Badajoz y mostrar al funcionario correspondiente los justificantes requeridos, pusimos rumbo al Observatorio del Alcornoque y del Corcho en la localidad de Coruche, nada más y nada menos que la autodenominada capital mundial del corcho. A pesar de que el Observatorio se encontraba cerrado al público, uno de sus técnicos, Carlos Abreu, nos atendió amablemente y nos facilitó los contactos necesarios para cumplir con nuestra misión.

Gracias a la información proporcionada por Carlos, pudimos conocer el trabajo de Arlindo Pirralho, para lo cual tuvimos que desplazamos hasta el municipio de Couço. Arlindo, que es sacador de corcho y que aprendió a trabajar este material gracias a su padre que fue pastor de ovejas, es además lo que denominaríamos un artista-artesano, ya que es capaz de tallar en corcho y decorar con increíble buen gusto cualquier tipo de figura, sin olvidarse de los objetos y utensilios de toda la vida, a los que siempre acompaña con su toque personal. Y para ello no creáis que necesita ningún tipo de herramienta especial: le basta y sobra con su imaginación, sus manos, una caladora, un serrucho, un cuchillo, una lija, y las panas de corcho que selecciona durante la saca.

De Couço pusimos rumbo a Vendas Novas, donde teníamos una cita con Jerónimo Manuel, que como Arlindo, vende sus creaciones principalmente en las ferias de la zona, aunque en su caso también recibe encargos de particulares y empresas. Este prolífico artesano se dedica a elaborar objetos de corte más tradicional, para lo cual selecciona la materia prima entre el corcho que el mismo saca. Nos encontramos ante un autodidáctica y enamorado del corcho que gracias a su pasión consigue unos ingresos extras.

Nuestra última parada en esta región nos llevó hasta las instalaciones de la empresa Cortiçarte en Azaruja, a 20 kilómetros de Évora. En esta fábrica, desde hace ya cuatro generaciones, se elaboran artesanías de corcho cuyo destino principal es el de abastecer tanto las tiendas de artesanía de Évora, como las del resto del país.

Cortiçarte constituye un interesante ejemplo de empresa familiar, donde los operarios en verano sacan el corcho y el resto del año permanecen en la fábrica preparando las panas con destino a la industria taponera y elaborando artesanías con el corcho que no cumple con la calidad suficiente para fabricar tapones.

Las instalaciones de esta fábrica cuentan con cuatro zonas bien diferenciadas: una campa exterior para recibir el corcho, almacenarlo y airearlo una vez hervido; una área donde se selecciona el corcho, se hierve y se forman los fardos con las panas; una área donde se fabrican y almacenan las artesanías; y un local donde se exponen los productos para la venta al por mayor y al detalle.

En la zona donde se elaboran las artesanías podemos encontrar la maquinaría típica de cualquier carpintería de madera, con un limitado nivel de automatización. Así pues, podemos decir que nos encontramos ante un negocio donde la mano de obra cualificada es sin duda un factor diferencial, ya que sin las habilidades y destrezas de sus operarios no sería posible elaborar un producto final con la calidad mínima exigida, lo que nos permite clasificarla como una industria de tipo artesanal.

Desde Évora, capital del Alentejo, pusimos rumbo a latitudes más meridionales, en concreto Faro, la capital del Algarve. Y a 20 kilómetros de esta bonita ciudad costera se encuentra otro de los centros de referencia para la industria corchera portuguesa: São Brás de Alportel.

En esta pintoresca localidad nos recibió Sofía Carrusca, cuya familia es propietaria de Eco-Cork Factory, fábrica que compra corcho y prepara las panas con destino a la industria taponera. Sofia, además de la heredera de la empresa, también a conseguido diversificar el negocio a través de un emprendimiento turístico denominado Algarve Rotas (www.algarverotas.com) y de la creación de su propia marca de productos de corcho Cork Inov Nature (www.corkinov-inovacao-cortica.webnode.pt).

Esta inquieta algarveña está también detrás de la tienda de venta al detalle ubicada en el interior de la fábrica, donde podemos encontrar principalmente bisutería y complementos elaborados con tejido de corcho, algunos de ellos fabricados en un pequeño taller anexo. Todos estos espacios (fábrica, tienda y taller), han sido integrados dentro de una ruta turística temática en torno al corcho que ella misma comercializa a través de Algarve Rotas.

No queremos finalizar nuestra crónica sin agradecer el tiempo y los contactos compartidos por el personal del Proyecto TASA en Loulé, en especial a Graça Palma y Joao Ministro. Sobre esta iniciativa basada en la actualización de las artesanías tradicionales de la región del Algarve, que ya tratamos en un artículo anterior, podéis informaros a través del enlace que incluimos en el apartado del blog “Sitios de Interés”.

Bienvenidos al norte

Aprovechando que las restricciones sanitarias poco a poco van levantándose, hemos podido salir por fin de la Sierra de Espadán y con ello iniciar nuestra ruta de investigación por los territorios corcheros de la Península.

Y la primera parada ha sido -como no podría ser de otra forma- la comarca del Baix Ampurdà en Girona, concretamente el municipio de Palafrugell, situado en el sector oriental de una importante zona productora de corcho y donde se asentó el grueso de la industria taponera nacional a finales del siglo XIX.

El vínculo de esta zona corchera con la Sierra de Espadán es muy estrecho, no solo por las similitudes de un ecosistema donde predomina el alcornocal de montaña, sino también porque éste fue históricamente el destino final del corcho producido en Espadán, incluso propiciando que empresarios catalanes instalaran las primeras fábricas de tapones en tierras castellonenses a principios del siglo XX.

Ya en Palafrugell, pudimos conocer el Museu del Suro de la mano de Pep Espadalé y Àngela Martí, inmejorables anfitriones que nos descubrieron las peculiaridades del sector corchero catalán y nos facilitaron los contactos necesarios para continuar con nuestra labor.

La visita al museo nos ayudó a comprender la importancia de este material, que hasta hace menos de un siglo y debido a sus incomparables propiedades físicas y químicas, no tenía competencia. Como muestra de ello, aquí tenéis una colección de objetos fabricados con corcho.

Otra de las conclusiones a las que llegamos tras la visita al museo, es que la industria taponera alcanzó en estas tierras un grado de desarrollo y de generación de riqueza tal, que otros usos de este recurso, como por ejemplo la elaboración de artesanías, nunca fueron más allá de lo anecdótico. Para encontrar otro destino de la producción de corcho con suficiente entidad, habría que poner el foco en la industria del aglomerado, que actualmente también se encuentra en franco retroceso.

Aún así, nosotros no cejamos en nuestro empeño y pusimos rumbo hacía Capmany, en la comarca de l’Alt Ampurdà, para visitar al artista y artesano Joan Aguilera Rosell, quien amablemente nos abrió las puertas de su casa y nos mostró su colección de obras de arte. Y es que Joan es un enamorado del corcho al que la afición le viene de familia, en concreto de su padre, antiguo operario forestal y también artesano. Las herramientas que emplea Joan para trabajar el corcho son las básicas: una sierra de calar, un cutter y una lijadora multifunción. Las panas de corcho las obtiene de la industria local, aunque también aprovecha el corcho de árboles muertos que encuentra por el bosque. Aquí os dejamos con alguna de sus peculiares creaciones.

Uno de los encuentros más destacables, fue el que tuvimos en el municipio de Cassà de la Selva, en la comarca del Gironés, con Dolors Roset, técnica del área de promoción económica del ayuntamiento, y Eduard Mestres, otro enamorado del corcho y única persona en toda Cataluña que dispone del carnet de maestro artesano. Y para muestra de la calidad de su trabajo… un botón.

Dolors y Eduard nos invitaron a participar en una jornada de plantación de alcornoques con escolares, donde fuimos testigos de excepción de la importancia que las autoridades locales otorgan a la conservación de sus recursos naturales. También pudimos disfrutar de una breve pero interesante exposición sobre el desempeño de mujeres y niños/as niñas en la industria corchera catalana.

Destacar que este municipio, desde hace ya unos años, organiza anualmente la Fira del Tap i el Suro, demostrando así la importancia que tuvo -y todavía conserva- este recurso para la economía casanense, y en la que estaremos encantados de participar si, llegado el caso, nos invitan a presentar nuestra experiencia con el laboratorio de corcho SuberLab.

Finalmente queremos también agradecer la amabilidad y disponibilidad de Oriol Granyer, técnico del Consorci de les Gavarres, de Albert Hereu, Director del Institut Català del Suro, y de Guillem Genover y Paula Blanco, miembro de la Comisión Ejecutiva y responsable técnica de la Red Europea de Territorios Corcheros (RETECORK).

Cultura DIY

Después una toma primera toma de contacto con el mundo de los blogs, ahora le toca el turno a los tutoriales. Según su definición, un tutorial es un método de transferencia de conocimiento o un sistema instructivo de corta duración y basado en el autoaprendizaje, pudiendo ser parte de un proceso de aprendizaje mayor.

En el caso que nos ocupa, se trataría de vídeos de corta duración que muestran los materiales, herramientas, técnicas, etc. necesarias para transformar el corcho en un objeto o utensilio concreto. Existen multitud de plataformas de vídeo donde podemos encontrar tutoriales de este tipo (Youtube, Vimeo, etc.), así como algunos sitios web que recopilan este material audiovisual:

https://manualidades.facilisimo.com/mas-de-20-ideas-diy-con-corcho_2311149.html

Estos y otros tutoriales se enmarcan dentro de lo que se conoce como cultura DIY, en castellano “hazlo tu mismo”, y que según lo que hemos podido averiguar gracias a la Wikipedia:

El concepto «hágalo usted mismo» o «hazlo tú mismo» abreviado como HUM, HTM o DIY (esto último por sus siglas en el idioma inglés Do It Yourself), es la práctica de la fabricación o reparación de objetos por uno mismo, generalmente se utiliza para ahorrar dinero, pues así se obtienen múltiples beneficios: se desarrolla una actividad manual interesante y motivadora, y al mismo tiempo se aprende con la práctica, se logran manualidad y destrezas, se combaten el aburrimiento, el malhumor, el tedio, y el cansancio, sin causas aparentes claras, etc.

La ética del Do It Yourself en muchos casos se asocia al anticapitalismo, ya que rechaza la idea de tener que comprar las cosas que uno desea o necesita, intentando hacerlas por uno mismo. Se trata de un movimiento contracultural. Hay muchos ejemplos del uso de esta filosofía. Entre otros, se encuentran las reparaciones que alguien hace en su casa sin la necesidad de tener que recurrir a profesionales. Esto ha sido heredado por otros movimientos contraculturales, tales como el punk, el indie y contraculturas denominadas germinativas.

(...)

Aunque parece que el concepto tiene una gran implicación de autogestión, también ha sido muy promocionado como estrategia empresarial para dar salida a otros productos que podrían dejar de venderse o ampliar los mercados de ciertos productos.

Surfeando la red

Después de un primer «chapuzón» por la red en busca de páginas y blogs que promuevan nuevos usos y aprovechamientos del corcho, nos encontramos -tal y como era de esperar- con una amplia mayoría de opciones que giran en torno a las manualidades con tapones de corcho reciclados.

Este formato de trabajo, aún resultando interesante (no en vano los tapones son el destino de la mayor parte del corcho de calidad extraído en la Sierra de Espadán), presenta el inconveniente de no poder garantizar la procedencia del material empleado, especialmente si recurrimos a la colaboración de familiares y amigos para abastecernos. O dicho de otro modo, estaremos fabricando objetos con tapones de cuya materia prima desconocemos el origen (probablemente muy alejado de nuestro territorio).

También se da la circunstancia de que la mayoría de sitios visitados incorporan solo imágenes de las artesanías, sin detallar las diferentes etapas del proceso creativo ni mencionar las técnicas y materiales empleados, con alguna rara excepción como la del blog “Uma Decoración”, que podéis consultar en el siguiente enlace:

https://www.umadecoracion.com/manualidades-recicladas/manualidades-con-tapones-de-corcho/

A pesar de lo cual, recomendamos visitar algunas de estas webs para tomar conciencia del potencial del corcho como elemento decorativo, en especial la página Pinterest de la iniciativa CORK, de la que rescataremos algunas propuestas en futuras entradas.

Territori Espadà

Espadán en red /Espadà en xarxa